El Programa Mundial de Alimentos (WFP) está ampliando su respuesta de emergencia tras el huracán Melissa, que afectó a casi seis millones de personas en Jamaica, Cuba y Haití. El organismo ya distribuye alimentos de emergencia en las zonas más golpeadas y prevé el envío de más suministros en los próximos días.
En Jamaica, donde comunidades agrícolas como St. Elizabeth quedaron devastadas, se espera asistir hasta a 200.000 habitantes con comida y transferencias de efectivo. En Cuba, ya se entregaron alimentos a más de 181.000 evacuados. WFP tiene previsto prestar asistencia a 900.000 personas que necesitarán ayuda alimentaria de emergencia durante tres meses, y la mitad de ellas durante otros tres meses.
En Haití, donde la infraestructura costera quedó arrasada, el organismo ha dado ayuda en efectivo a 50.000 personas y distribuye raciones a familias que regresan a sus hogares, con el objetivo de llegar a 190.000.
Barcos franceses y holandeses en el Caribe, con el apoyo de la Unión Europea, están de camino a Jamaica con ayuda. Estados Unidos también está proporcionando transporte aéreo y la UEU apoyará una operación de puente aéreo para enviar suministros vitales.
La agencia lanzó un llamamiento urgente de 74 millones de dólares para asistir a 1,1 millones de personas y reforzar la respuesta humanitaria en los países más afectados.