Colombia tiene la oportunidad de convertirse en líder regional en la implementación de combustibles de aviación sostenibles (SAF), siempre que se adopten políticas públicas basadas en criterios técnicos, equilibradas y alineadas con los compromisos ambientales multilaterales.

En ese contexto, la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) presentó cinco recomendaciones clave para impulsar este proceso, destacando la importancia de construir un ecosistema que garantice la sostenibilidad económica, ambiental y técnica del sector de la aviación colombiano.

1. Evitar imponer un mandato de mezcla de SAF

Según la IATA, la imposición de la mezcla obligatoria de combustible para aviación en Colombia podría provocar un aumento significativo en los costos del combustible de aviación. Este aumento se trasladaría directamente a los precios de los boletos, afectando la demanda y la conectividad, especialmente en rutas sensibles al precio como las que conectan la Amazonía, el Pacífico o los archipiélagos.

En Europa y el Reino Unido, los costos del fueloil se han quintuplicado debido a la implementación de la mezcla obligatoria. Por lo tanto, las políticas públicas en Colombia deberían centrarse en fortalecer la infraestructura, la logística y la producción nacional antes de imponer mandatos que podrían afectar la viabilidad operativa del sector.

2. Implementar incentivos fiscales para la producción y el consumo de SAF.

El elevado coste del SAF representa uno de los principales obstáculos para su adopción. Por lo tanto, la IATA propone la creación de incentivos fiscales tanto para la oferta como para la demanda con el fin de facilitar una transición ordenada y competitiva.

Entre las medidas sugeridas se encuentran la exención del IVA proporcional a la fracción de SAF utilizada por las aerolíneas y la exención del impuesto al carbono cuando se utilizan combustibles que cumplen con las normas internacionales de reducción de emisiones, de conformidad con lo dispuesto en la Ley 1819 de 2016 y el Decreto 926 de 2017.

Un plan de incentivos de este tipo aceleraría la adopción de SAF y consolidaría a Colombia como líder regional en sostenibilidad de la aviación.

“Los combustibles de aviación sostenibles marcarán un punto de inflexión en la forma en que opera la industria aérea a nivel mundial. IATA está comprometida a apoyar al gobierno colombiano para asegurar que su implementación sea lo más rigurosa y eficiente posible, garantizando una transición energética justa, segura y efectiva para el sector”,
afirmó Paula Bernal, Directora de IATA Colombia.

“Invitamos al Gobierno Nacional a identificar las mejores opciones de desarrollo para la SAF en Colombia, para que todos podamos contribuir al crecimiento del sector y al desarrollo económico y social del país en los próximos años”, agregó.

Fuente: IATA