¿Sabía que la lengua puede ser no sólo un instrumento del gusto, sino también un espejo de su salud?
Publicado en 12/11/2025 07:05
Salud

Este asombroso órgano puede informarle de muchos problemas en el cuerpo, incluida una enfermedad tan grave como el cáncer.

Veamos cómo la lengua puede indicar la presencia de cáncer y a qué hay que prestar atención.

La lengua como indicador de salud

Cada uno de nosotros ha experimentado al menos una vez la sensación de mirarse al espejo y notar cambios en la lengua: placa, color, textura.

Normalmente no le prestamos mucha atención, pero la lengua es una especie de mapa del estado de nuestro cuerpo. Sus diferentes partes están relacionadas con distintos órganos y sistemas.

¿A qué hay que prestar atención?

Lo primero que hay que recordar es la autoobservación regular.

Acostúmbrese a examinar periódicamente su lengua. Lo que debe alertarte inmediatamente

  1. Un cambio de color. La lengua de una persona sana es rosada, ligeramente húmeda. Si de repente se vuelve demasiado pálida, de color rojo vivo, azul o negro, puede ser señal de un problema.

Un tono azul puede indicar falta de oxígeno en la sangre, y una lengua negra y vellosa puede indicar trastornos gastrointestinales graves.

  1. Presencia de bultos o protuberancias. Si notas masas densas, bultos o úlceras, es un serio motivo de preocupación. Tales cambios pueden ser un signo de cáncer de lengua o mucosa oral en fase inicial.
  2. Dolor o molestias persistentes. Si experimenta dolor crónico o ardor en la lengua, especialmente sin razón aparente, podría ser una señal de que el cáncer se está desarrollando.
  3. Placa blanca o roja. Aunque la placa en la lengua es bastante común, una cantidad o color anormales pueden indicar problemas.

Una placa blanca y densa difícil de eliminar puede indicar leucoplasia, una afección precancerosa.

¿Cómo me hago una autocomprobación?

Para identificar con precisión posibles problemas, sigue estas sencillas pautas:

  1. Preste atención al aspecto. Ilumina tu lengua con una luz brillante y examina cuidadosamente su superficie.

Busque cambios de color y estructura.

  1. Realice la palpación. Palpe suavemente toda la longitud de la lengua. Hasta el más mínimo cambio de textura debe alertarte.
  2. Observar la sensibilidad. Preste atención a cualquier cambio en la sensibilidad y la percepción del gusto.

Acudir rápidamente al médico

Si nota alguno de los problemas descritos, no demore la visita al médico. Sólo un especialista podrá realizar las pruebas necesarias y establecer un diagnóstico preciso. Recuerde: un diagnóstico precoz aumenta considerablemente las posibilidades de éxito del tratamiento.

Su salud está en sus manos, y la atención oportuna a su cuerpo es la mejor manera de evitar problemas graves.

Conclusión

La lengua no es sólo un órgano para el habla y la nutrición. Es un indicador de nuestro estado interno. Recuerde: incluso los cambios más leves, aparentemente insignificantes, pueden ser señal de trastornos graves.

No ignore estas señales, vigile su salud y deje que su lengua sólo le dé buenas noticias. Prestarte atención puede, literalmente, salvarte la vida.

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